Averroes
Con Averroes nos encontramos con uno de los personajes cordobeses de mayor trascendenia histórica. Es la forma latina de su nombre árabe Abu l-Walid Muhammad ibn Ahmad ibn Muhammad ibn Rushd que llego a ser el más ilustre astrónomo, escritor y filósofo de la España musulmana.
Averroes nació en el seno de una ilustre familia de juristas cordobeses ya que tanto su abuelo como su padre ejercían el cargo de cadí principal de Córdoba. Desde temprana edad se formó en disciplinas tan diversas como la medicina, la filosofía, la astronomía, la teología y la literatura.
Siguiendo los pasos de sus antecedentes, ejerció el cargo de juez en Sevilla (1169) y en Córdoba (1171). En 1182 fue designado como médico de la corte del califa almohade Abu Yaacub Yúsuf. Pero sobre todo Averroes es conocido por sus traducciones de las obras de Aristóteles. Entre sus numerosos tratados destacan en especial sus "Comentarios a Aristóteles" que, a partir de entonces, tuvieron una gran repercusión en la filosofía.
Sin embargo, el fanatismo islámico que marcaba la política del imperio almohade hacía finales del siglo XII fue el motivo por el que las obras de Averroes fueron prohibidas. Debido a esta censura gran parte de su trabajo se perdió para siempre. Otras muchas obras sólo las conocemos por haber sido traducidas al hebreo y al latín pero no existen en su lengua original, el árabe.
En consecuencia de estas políticas, Averroes fue desterrado de Córdoba y aislado en Lucena y posteriormente en Cabra. Sin embargo, poco antes de su muerte fue rehabilitado y se trasladó a la corte de Marruecos donde falleció en el año 1198.
El monumento con el que la ciudad honra su persona, se sitúa en la calle Cairúan junto a la Puerta de la Luna. Realizada en al año 1967 por Pablo Yusti Conejo muestra a Averroes sentado sujetando un libro sobre sus rodillas.
Ubicación
C/ Cairuán, s/n
14004 Córdoba
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